12 Jun Liquidación de bienes abogado Asturias

Cuando una pareja decide poner fin a su matrimonio, uno de los aspectos más importantes a abordar es la distribución de los bienes adquiridos durante la relación. La división de bienes gananciales es el procedimiento mediante el cual se reparte el patrimonio común entre los cónyuges, para que cada uno reciba su parte correspondiente.

En este artículo, explicaremos los principales aspectos relacionados con la liquidación de bienes gananciales en casos de divorcio.

La liquidación de bienes gananciales es un paso necesario para finalizar la relación económica establecida en el matrimonio. Este proceso suele ser complicado, ya que pueden surgir disputas sobre la propiedad de los bienes, su valoración y la asignación de deudas, entre otros asuntos.

¿Qué son los bienes gananciales?

Los bienes gananciales son aquellos adquiridos durante el matrimonio, tanto de manera individual como conjunta. Todos los bienes adquiridos durante la unión se consideran propiedad de ambos cónyuges, sin importar quién los haya comprado o financiado.

Es importante destacar que en algunos casos existen bienes que no son considerados gananciales, como aquellos recibidos por uno de los cónyuges mediante herencia o donación.

¿Qué bienes no se incluyen en la liquidación de gananciales?

Existen ciertos bienes que no forman parte del conjunto de bienes gananciales, conocidos como bienes privativos. Estos bienes pertenecen exclusivamente a uno de los cónyuges y no deben ser incluidos en la liquidación de gananciales.

Los bienes privativos son aquellos adquiridos antes del matrimonio, los obtenidos durante el matrimonio a través de herencia o donación, y aquellos adquiridos durante el matrimonio mediante el uso de recursos o bienes privativos.

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¿Cómo se lleva a cabo la liquidación de gananciales?

La liquidación de gananciales se realiza mediante un acuerdo entre los cónyuges o a través de una resolución judicial.

En caso de llegar a un acuerdo, se establecerá la distribución de los bienes gananciales entre los cónyuges. En ausencia de acuerdo, será el juez quien tome la decisión y reparta equitativamente los bienes gananciales.

Una vez que todos los bienes han sido valorados, se procede a la división. En este proceso, existen diversas opciones, dependiendo de lo previamente acordado por la pareja o de lo estipulado por la ley.

Por ejemplo, se puede optar por una división equitativa de los bienes o por una división basada en la contribución de cada cónyuge a la adquisición de los mismos.

¿Qué sucede si la pareja no llega a un acuerdo en la liquidación de gananciales?

Si la pareja no logra ponerse de acuerdo en la liquidación de gananciales, será necesario recurrir a un proceso judicial. En este caso, un juez decidirá cómo se llevará a cabo la liquidación y la distribución de los bienes.

Es importante destacar que este proceso puede ser largo y costoso, por lo que se recomienda intentar llegar a un acuerdo de manera amistosa.

¿Cuál es el plazo para realizar la liquidación de gananciales?

La liquidación de gananciales debe realizarse dentro de un año desde la separación o el divorcio. Si este plazo no se cumple, se podría perder el derecho a reclamar la división de los bienes comunes.

Si te encuentras en proceso de divorcio y necesitas liquidar bienes gananciales, es fundamental que conozcas todos los aspectos legales y cuentes con el apoyo de profesionales abogados en Asturias que puedan orientarte durante este proceso.

Resumen sobre: Liquidación de bienes abogado Asturias

Cuando una pareja se divorcia, la liquidación de bienes gananciales es un paso importante. Es el procedimiento para repartir el patrimonio común entre los cónyuges. Se deben considerar los bienes gananciales, aquellos adquiridos durante el matrimonio, y los bienes privativos, que pertenecen exclusivamente a uno de los cónyuges. La liquidación puede llevarse a cabo mediante acuerdo o resolución judicial. Es esencial cumplir con el plazo de un año para evitar perder el derecho a reclamar la división de los bienes comunes.